Ayer martes 17 de Abril comencé a impartir clases como Instructor Bujinkan autorizado por mi profesor Néstor Iscovi. Fue una experiencia muy enriquecedora, incluso más de lo que esperaba. Había invitado a varias personas (futuros alumnos) que quedaron de llegar, pero ya casi a la hora de inicio sólo uno estaba en la puerta del Dojo, momentos después llegó mi amigo Erick Miranda (con quien compartimos la clase entera) y tras cartón un joven que aunque vive por mi barrio, nunca había visto. Esto me llamó mucho la atención pues la disposición de estos 2 alumnos nuevos era mayúscula, de tal manera que el lugar se sentía absolutamente lleno, como si hubieran habido 10 personas.
La clase inició a las 20:30 hrs. en punto, con 2 alumnos, además de mi buyu Erick y yo. Sinceramente me sentí nervioso al momento de comenzar a impartir y traspasar los conocimientos que Sensei nos ha legado, los primeros 15 mins. fueron en mi mente un continuo ¿lo estaré haciendo bien?, ¿era así? o un simple "parece que me equivoqué", pero al poco andar recordé que pensar mucho y planificar cada movimiento nos quita libertad a nuestro Taijutsu y por ende a nuestra vida; por lo que todo comenzó a fluir, gracias a Dios y a todos mis grandes amigos que "se encontraban ahí".
En un instante ya eran las 10 de la noche, momento de terminar, al mirar el reloj me encontré con que habían varias personas mirando muy concentrádamente la clase, las cuales al final de ésta se acercaron a consultar sobre lo que vieron e incluso a aventurarse con una próxima participación.
Estoy feliz, creo que todo seguirá creciendo, la verdad algo me da la certeza que todo será para bien, ¡estoy seguro!.
Muchas gracias a todos por su apoyo, esto es el inicio de algo grande, no en cantidad... en corazón.
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